El Club de Pesca Órbigo programa para esta temporada cursos para que los pescadores mejoren tanto su técnica en cola de rata como el montaje de moscas en todas sus variedades

Dentro del calendario de actividades que el Club de Pesca Órbigo ha programado para esta temporada figuraba la realización de un curso de lance y pesca a mosca en Hospital de Órbigo. También un curso de lance y montaje en el Paso Honroso. A ambas actividades asistieron numerosos socios del club, interesados en mejorar tanto su técnica de lance en cola de rata como el aprendizaje o perfeccionamiento del montaje de moscas en todas sus variedades (secas, ahogadas y ninfas). La reunión se realizó a partir de las 9.30 horas con una pequeña charla teórica, tras el café, sobre las diversas técnicas del lance.

El curso, preferentemente práctico, tuvo una introducción teórica de unos treinta minutos y fue desarrollado por Andrés Llamazares, socio del club. El ponente ha realizado numerosos cursos impartidos por la EFFA y que ahora pone a disposición de los integrantes del club Órbigo. Los horarios fueron los siguientes: sábado de 9.30 a 13.30 y de 15.30 a 18.30, y domingo de 9.30 a 14.00 horas.

Para todos los asistentes a las jornadas a partir de las 16.30 a 18.30 tuvo lugar otro curso de montaje impartido por José Luis Corral Iglesias (mosca seca), Marcelino de la Calle (mosca ahogada), Carlos Prada (ninfa y perdigones) y Josamel (secas trenzadas). Todo ello se realizó en las instalaciones del hotel El Paso Honroso.

El pasado fin de semana tuvo lugar la limpieza del río Órbigo en el término municipal de Hospital, y más concretamente desde el final del Escenario Deportivo Social, en la zona conocida como el Patacal hasta el puente de la autopista. Pese a que esta limpieza se desarrolla año tras año, por ser este un lugar emblemático muy visitado por pescadores al ser zona libre, no deja de sorprender la cantidad de basura que se acumula en sus márgenes, especialmente en la zona de paseo próxima al puente románico. Colchones, somieres, electrodomésticos y otros desechos de menor volumen fueron extraídos del lecho de inundación y aledaños, pese a que el río discurría con bastante caudal. Todos estos residuos fueron enviados al punto limpio. A pesar de que las limpiezas de cauces fluviales que organizan diversas asociaciones de pescadores tan solo representan un pequeño porcentaje en una provincia con 3.000 kilómetros estimados de ríos trucheros, no dejan de significar un importante estímulo y sirven de denuncia hacia la administración.